La llegada de la campaña electoral ha significado el aumento en las actividades realizadas por el gobierno y sus distintos entes.
Esto se traduce en un crecimiento en el gasto, sin embargo las erogaciones que presenta la Tesorería Nacional al 8 de septiembre registran una caída en términos reales al compararse con el año pasado. Esta circunstancia hace prever que las facturas generadas por la campaña serán pagadas el próximo año con el presupuesto del 2011.
Ángel García Banchs, Phd en economía y profesor del Cendes de la UCV, comentó que hasta el 8 de septiembre los pagos hechos por el gobierno crecieron 16% en términos nominales al compararse con el 2009, pero que en términos reales, al corregirse por inflación, hay un descenso de 11%.
"Esto no quiere decir que no se esté ejecutando gasto. Siempre puede haber gasto con base a cuentas por pagar que tenga el gobierno. Hay una diferencia entre el gasto pagado, que son la erogaciones, y el gasto ejecutado que son todos los bienes y servicios que se disfrutan independientemente se cancelen o no".
El economista agregó que usualmente estas facturas se pagan a 60 ó 90 días, por lo cual lo más probable que se cancelen para después de las elecciones.
Igualmente señaló que el alcance real del gasto del gobierno durante estos meses de la campaña se verá en enero del 2011, en la cuenta de presupuesto pagado del 2010 de la tesorería.
SE PAGA MENOS
El año pasado entre julio y los primeros 8 días de septiembre el gobierno pagó 41 mil millones de bolívares, y este año en ese mismo período erogó 44 mil millones.
Durante este tiempo, en el cual se inició la campaña electoral, los gastos pagados por el sector público cayeron 17% en términos reales del 2009 a este 2010.
Esto es una muestra clara que el efecto de la campaña electoral no se ha visto desde el punto de vista de lo desembolsillado por el gobierno. Para García Banchs la explicación es muy sencilla: el gobierno no tiene dólares. "Escasez de dólares mata campaña", dijo el especialista.
Con un panorama donde hay dependencia excesiva de las importaciones, y las reservas internacionales pueden cubrir sólo 4 meses de estas, aumentar las erogaciones colocando más dinero en la economía se traduciría en mayor presión para las reservas y para los precios debido a los problemas que se han presentado con la oferta, explicó el economista.
Por lo tanto, el gobierno se ha visto en la obligación de bajar el freno al gasto para evitar generar mayores presiones macroeconómicas, más aún dentro del panorama electoral.
El Estado se encargaría en el 2011 de enfrentar todas estas variables económicas con nuevos ajustes, comentó Banchs, entre los que no se descarta una nueva devaluación.
Tal Cual Digital
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