Ramón Guillermo, ¿cómo es tu trabajo en la MUD?
—Llevando la conserjería. La junta de condominio son los partidos y la secretaría ejecutiva, que está a mi cargo, es la conserjería que cuando se rompe un tubo, cuando se va la luz hay que prenderla...
ese es mi trabajo en la MUD. Hemos avanzado mucho y no hemos dejado de avanzar y, además, todos los compromisos que la Mesa ha asumido los ha cumplido. Para el 26 de septiembre demostramos que el gobierno era derrotable, que hay un camino democrático, cívico, para cambiar la situación, que hay una alternativa. Después de eso la Mesa continuó, la bancada parlamentaria trabaja unida y ahí está planteando iniciativas, teniendo puntos de vista. Ya el reglamento de la selección de candidatos fue aprobado y la comisión electoral elegida por unanimidad; se están designando las juntas electorales regionales, estamos trabajando en un programa de gobierno, en el compromiso para un gobierno de unidad nacional.
—¿Cómo será ese gobierno de unidad nacional?
—Estará enfocado en respuestas a los problemas sociales, verdaderas, al fondo de esos problemas. Tiene que ser un gobierno de unidad nacional mucho más abierto, de todos, para todos los venezolanos. Eso requiere que no pueden ser sólo los partidos de la Mesa, por un lado porque los partidos no pueden dejar solo al candidato una vez elegido, sino que van a acompañarlo en la campaña y en el gobierno, pero no pueden ser sólo los partidos de la Mesa, tiene que ser un gobierno que incluya, que llame a todo el país y que garantice a la oposición algo que no hemos tenido nosotros que es respeto, reconocimiento y diálogo porque el país es diverso y así tiene que reconocerse y, finalmente, para que haya un gobierno de unidad nacional tiene que haber una campaña de unidad y ahí hay dos aspectos fundamentales: ya está acordado que el candidato tendrá un comando con respaldo de todos los partidos y la Mesa permanece como condición política de la campaña y después para atender las responsabilidades que deriven de las elecciones. Y la tarjeta de la unidad que es instrumento de adhesión voluntaria por parte de los partidos que la crearon unánimemente, pero se puede adherir voluntariamente si los partidos pueden resolver si mantienen sus símbolos o si adhieren a esa tarjeta de acuerdo con su propio análisis de la realidad, lo cual va mostrando una sinergia en el seno de la unidad que es lo que hace que la Mesa no sea solamente la oposición, sino que es la alternativa.
—¿Por qué tanto temor del gobierno por la tarjeta de la unidad?
—Le tiene miedo a la unidad, apuesta a la división. Un gobierno que se ha dedicado todos estos años a intentar dividir a los venezolanos, lo que aparezca como unidad le tiene alergia. Además, la unidad tiene dos características que hacen mucha falta en el país: capacidad de entendimiento y que haya reglas claras que se cumplen y creo que el gobierno es alérgico a esas cosas. La tarjeta es una expresión de eso y el gobierno se la pasa diciendo que estamos divididos, que nos vamos a acabar en cualquier momento... y ven que pasa el tiempo y no hay división, más bien nos unificamos, nos fortalecemos, entonces han salido con esta andanada de plomo. El Presidente le ha dicho a su partido que hagan lo imposible para que la MUD llegue al poder... en lugar de gobernar. Se requiere de un gobierno que se ocupe de gobernar. En este país todos estamos agotados de la confrontación, de los insultos, de la agresión.
—¿La MUD ha sospechado un posible adelanto de elecciones?
—Estamos preparados para cualquier escenario. Para un adelantamiento de elecciones que yo considero poco probable estamos preparados y tenemos nuestros planes de contingencia. La fecha que escogimos para las primarias es suficientemente prudente y nuestra posición es no modificarla; claro, estamos atentos y no estamos obligados a soltar prenda hasta que veamos cómo es la cosa. Lo que nos parece anormal es que el CNE no haya dicho cuándo vamos a elegir presidente, gobernadores y consejos legislativos de los estados, y alcaldes y concejos municipales.
—¿Debemos estar optimistas con el trabajo de la MUD?
—Aquí hay un rumbo, ésta es una política para producir un cambio democrático, pacífico, constitucional. La MUD es una política que tiene una estrategia inequívoca que es el cambio democrático produciendo alternativas y un camino que es la unidad programática, la unidad electoral.
En ese rumbo estamos y de ahí no nos saca nadie aunque nos provoquen, nos intriguen, traten de dividirnos. Las reglas que se cumplen y el diálogo para el entendimiento le dan a la MUD una estructura antisísmica, que se puede bambolear, pero nunca se rompe.
—¿Te gusta comer?
—Jajajaja, es evidente. De los pecados capitales el mío es la gula, soy goloso, comelón y tengo que estar dominando siempre el pico pero, además, si se puede comer bien, mejor. Cocino poco, mi esposa cocina muy bien y vengo de una casa donde se cocinaba muy bien. Mi abuela Adela era una gran cocinera y luego mi mamá comenzó a cocinar, sobre todo los postres de la tradición familiar. De las cosas larenses soy devoto del lomo prensao que es una maravilla, una prueba de la existencia de Dios, si a alguien quieren convencerlo de que deje el ateísmo hay que enseñarle un lomo prensao, jajajaja. También me gustan las cosas caraqueñas como el pastel de polvorosa y el asado negro.
MOZART Y CELIA CRUZ
Me gusta escuchar música clásica, principalmente Mozart por ser el más alegre, digerible, en el carro tengo varias versiones de los conciertos de piano. Me gustan los Beatles y los Rolling Stones y mantengo un gusto permanente por la música venezolana con interpretación más nueva. Me gustan mucho los golpes de El Tocuyo y de Curarigua. Me gusta la música del Caribe y en particular el bolero y un disco de boleros cantados por Celia Cruz.
UN FELIZ CUMPLEAÑOS A SIMÓN DÍAZ
Simón tiene un lugar en nuestras vidas.
En el momento en que el país se urbanizaba él rescató la tonada y hace que eso forme parte de nuestras vivencias. El afecto por Simón nos recuerda que en realidad somos un solo pueblo, que hay cosas que están por encima de las diferencias y todo lo que nos recuerda eso nos hace muchísimo bien. Ese cumpleaños 83 de Simón fue un regalo para el país.
El Universal
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