Antonio Ledezma se mueve con facilidad ante las preguntas difíciles. Recuerda que de sus 56 años de edad, 43 los ha pasado en la arena política y que esto, junto con la "pasantía" que hizo en la Alcaldía Metropolitana, lo ubican como la mejor opción para conducir lo que denomina como una transición política en Venezuela. "Yo me siento en la edad perfecta a mis 56 años; más joven que Chávez, que Santos, que Alan García, que Piñera y que Dilma Rousseff", indica. Desde su oficina en Chacao el alcalde gesticula y es enfático al hacer sus propuestas.
Revisa su agenda, en la que aparecen urbanistas y diferentes actores políticos. Explica que adelanta un censo de los empresarios que bajaron sus santamarías para contactarlos luego de las elecciones presidenciales.
Ledezma señala que la voluntad popular le permitirá, en el caso de que resulte ganador, gobernar frente a un Parlamento, un Tribunal Supremo y un CNE que apoyan a Chávez. "Vamos a tener un pueblo atento al curso de los acontecimientos", asegura.
-¿Qué proyecto debe tener el candidato?
--Debe asumir cosas como estas: un proyecto de Estado que apunte a la separación de poderes. Ni la Fiscalía, ni la Contraloría, ni el TSJ pueden estar en manos de comisarios políticos.
Ese proyecto de Estado implica restablecer el orden alterado de la descentralización, impulsar la ley de hacienda pública estadal, devolverles a los estados y municipios buena parte de los impuestos que pagan en toda Venezuela.
Debe haber un Estado que garantice el ejercicio pleno de la libertad de expresión, de invertir, de emprender, de competir. Un Estado que sea moderador, para eso se requiere que se garanticen las reglas de juego.
-¿Está de acuerdo con que el candidato no aspire a la reelección?
--Aun cuando está en la Constitución el derecho a ser reelecto yo creo que con un periodo me bastaría para estabilizar al país, para establecer un ambiente de gobernabilidad en Venezuela, para reconstruir la economía y hacer de Venezuela una economía productiva. Puedo decir que a mí me gusta el Plan Barrio Adentro, lo que me preocupa son las fallas. Tenemos que darle prestigio a la red ambulatoria, si queremos desconcentrar los hospitales.
-¿Qué pasará con Chávez en el caso de que pierda las elecciones?
--Chávez lo primero que tiene que hacer es prepararse para hacer maletas. Él tiene que estar consciente de que va a producirse una decisión y que esa decisión tiene que ser acatada por todos. Lo que va a pasar con Chávez no lo voy a decidir yo. Yo no voy a montar tribunales de inquisición o cacería de brujas. Eso tendrá que resolverlo el Estado de Derecho. No voy a repetir los errores de Chávez.
-¿Cómo gobernar con una Asamblea Nacional, un TSJ y un CNE que son favorables al actual Gobierno?
--Lo primero que tiene que hacer el pueblo es entregarnos la llave para abrir la puerta que nos permita sofocar estos incendios que están horadando las instituciones públicas. Un candidato investido con la bandera de la victoria será un Presidente con una gran autoridad, pero consciente de que mientras más poder tenga mayor es la responsabilidad. El poder no es para abusar e imponer caprichos y desconocer la opinión ajena, que es lo que ha hecho Chávez.
--¿ Cualquier candidato puede derrotar a Chávez?
--Cualquiera de nosotros es mejor que Chávez. Una cosa es ser garantía de victoria y otra ser garantía de gobernabilidad y estabilidad. Sin ánimo de arrogancia, creo que yo garantizo la gobernabilidad y la estabilidad. Estoy en condiciones de asegurarles a los venezolanos que tendremos una transición segura que abrirá camino a la paz, que no va satisfacer una vanidad personal. Lo que busco es cumplir una gran responsabilidad en beneficio de mi pueblo.
-¿Qué ocurre si el CNE decide adelantar las elecciones para agosto?
--El Gobierno juega al escondite con el calendario electoral. Nosotros debemos exigir al CNE que diga, como lo hizo a finales de 2009, cuáles son las fechas de las elecciones.
Si el Gobierno pretende jugar al factor sorpresa adelantando las elecciones para julio o agosto, aquí tenemos una dirigencia opositora responsable, seria y madura. Hay que jugar con mucha capacidad táctica. Si el Gobierno adelanta las elecciones, nosotros no tenemos inconveniente en revisar el calendario.
-Han señalado que la fecha de las primarias perjudica a Capriles y le beneficia usted.
--Fui uno de los primeros que me definí y mal pueden decir que me favorece o me perjudica. Estoy como los Boy Scouts preparándome para cuando sea. Si es en agosto de este año o noviembre, estoy preparado. Propongo dos cosas: un pacto de no agresión y, en segundo lugar, una ronda de conversatorios públicos, organizados por medios que actúen con equilibrio.
El Nacional
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